Existen 3 ingredientes para lograr que el dinero llegue a tu vida:
- Dios
- La palabra y
- Tú
La biblia dice que servimos a El Shaddai, el Dios que es más que suficiente. La palabra de Dios es fiel y nunca cambia…
¿Y tú?… ¿Cómo estás tú?
¡Porque eres tú quien decide lo que deseas en cuanto a tu propia prosperidad!
Todo el dinero y la prosperidad que necesitas ya esta aquí en el planeta tierra, sin embargo, el 95% de la riqueza está en el las manos de un 5% de la población y el otro 5% de ella está en el 95% de las manos… ¿Cómo te parece?
¿En qué grupo deseas estar tú?
Y todo lo que el cuerpo de Cristo necesita para evangelizar al mundo también ya esta aquí. Entonces ¿que esperamos?
Aquí es donde viene el problema de la gran mayoría…
Tu contestación a esta pregunta te revelará mucho sobre ti. Tus contestaciones a estas preguntas te darán la respuesta a todas esas excusas que te has dado, a todas esas preguntas sin contestar, a todas esas justificaciones que te das a ti mismo, para sentirte mejor… tal vez hasta te encuentres cara a cara con tus temores, miedos y mentiras creadas por la familia, los maestros, las herencias culturales…
¿Tú lo sabes?… Si, lo sabes… sólo que debes ir adentro tuyo a buscar las respuestas… o a recordarlas, porque cuando Dios te creó las puso ahí… De ahí viene el viejo adagio que dice:
“Todo el mundo nace con su pan debajo del brazo” y la oración del Padre Nuestro que dice “Padre Nuestro, que estás en los cielos, danos hoy nuestro pan de cada día…”
Llego el momento de reprogramar ese “disco duro” que tenemos en la mente. Muchos de los mitos generacionales han sido que el dinero es el mal de todo. Que tener demasiado no es bueno…
¡Esto es totalmente erróneo!
Seguramente viene de una infancia donde oías este tipo de afirmaciones acondicionándote a una vida de escasez.
Y contrario a todo lo que siempre has escuchado, estoy aquí para decirte que el dinero es la raíz de todo lo bueno:
- De la abundancia
- Del poder ayudar a los necesitados
- De poder construir hospitales, Iglesias, refugios para los menos privilegiados
- De dar grandes donaciones a obras benéficas
El dinero te dará la posibilidad de vivir una vida de abundancia para ti y tu familia…
Necesitas dinero para comprar la casa de tus sueños, ese automóvil que te quita el resuello, ropa, comida, buena educación para tus hijos, vacaciones para la familia…etc.
La vida está llena de ofrecimientos y sin límites a tu abundancia. Los limites los pones tú… Los decides tú.
El dinero es una herramienta divina dada por nuestro creador. Es una manera de cambiar algo por algo. El dinero solo lo gana el que produce. Y ¿sabes? La riqueza, la prosperidad existe gracias al valor que tú le das a tu esfuerzo, disciplina, diligencia y responsabilidad. El dinero tiene su propia energía y le atraen las personas que entienden sus virtudes, y respetan su poder.
El dinero tiende a fluir a gravitar hacia aquellos que lo van a hacer producir para cosas buenas, servicios de bien y para aquellos que lo invertirán en crear empleos, oportunidades que puedan beneficiar a otros.
Y al mismo tiempo, el dinero huye de aquellos que lo usan pobremente o lo gastan en maneras que no son proactivas. Y si no, mira a aquellos que han ganado fortunas en la lotería, o que han hecho millones en corto tiempo, no conociendo el honor y respeto que se merece.
Ahora aquí viene lo fuerte:
¿Sabes que es lo que te está alejando de tener dinero?…
Ya me prepara pata recibir mi abundancia para disfrutar y compartir con quien mas lo necesite
Estoy muy ansioso de aprender la abundancia a otro nivel
Entonces quédate pegadizo a nosotros, ya vienen los próximos la semana próxima. Abre tu mente y piensa en abundancia en cuanto a todo, y si puedes, da tu abundancia en todo también…te regresara con creces.
Eso me gusta ..,siempre he soñado con poder ayudar a otros,ir con un camión lleno de juguetes para niños ,verles sus caritas de felicidad ,siempre le pido a mi Padre poder tener y dar,aunque de lo poco q tengo me gusta compartir.
Muy sabio tu escrito Elsie, Dios te continúe usando,eres nuestro Ángel enviado por Dios.
Nunca había pensado en lo que decía el padre nuestro, a pesar de que era consciente que en el catolicismo, siempre buscamos a Dios fuera de nosotros.